Pintar y hacer escenografía puede dar las mismas alegrías que ganar una contienda en 1650 A Capa y Espada o los mismos quebraderos de cabeza que aprenderse un reglamento como el de Warhammer Fantasy (léelo una vez, luego practica, practica y practica). Aunque a veces las cosas no salen bien a la primera. No debemos desanimarnos en estas ocasiones, si no dejar pasar algo el tiempo y volver a la carga con otro planteamiento. Lo cierto es que esto es lo que nos paso cuando nos pusimos a hacer nuestro primer almiar para wargames. No salio, así que dejamos pasar el tiempo y probamos cosas distintas. Aquí tenéis el resultado de este nuevo intento, os presentamos: El almiar para wargames II.
Lo pegamos todo y le añadimos una base de Dm. En esta ocasión dejaríamos adrede las piezas de madera para el final. Así evitábamos mancharlas más adelante.
Además le dimos forma a la parte superior con un cutter.
A continuación hicimos un proceso muy parecido al del anterior almiar. Elaboramos unos churros de masilla de secado al aire Das con una longitud algo mayor que la de la circunferencia de las piezas de poliestireno.
Las aplastamos un poco y las colocamos una a una sobre el almiar después de aplicar algo de cola blanca..
Según colocábamos una la texturizábamos. Para ello usamos un cepillo de nylon. Siempre en la misma dirección arrastrábamos las cerdas por la masilla. De esta manera la forma del cepillo se quedaba impresa.
Cuando ya teníamos una sección hecha colocábamos la siguiente. Nosotros teníamos cuidado con que en cada sección solo hubiera una dirección del dibujo. Además las secciones tenían dibujos diferentes al variar la dirección en la que pasábamos el cepillo por cada pieza de masilla.
Cuando llegamosa la parte superior del almiar arrugamos la masilla para que esta tapara por completo el poliestireno interior y lo texturizamos.
Esto no nos termino de convencer. No quedaba bien. Así que retiramos la última capa de masilla.
Hicimos una nueva con forma plana y circular.
La acomodamos en la parte superior y la texturizamos de la misma manera que lo habíamos hecho con las piezas inferiores.
A estas alturas ya teníamos casi todo el trabajo de masilla hecho. Solo faltaba la base y las maderas.
Aprovechamos unos retales de balsa que teníamos. Le dimos forma redondeada y devastamos con el cepillo de metal.
Después practicamos tres orificios en el almiar. Uno en la parte superior y otros dos en la parte inferior.
Antes de colocar las piezas de madera terminamos las bases. Se cantearon y se les aplico cola blanca
Se recubrieron de masilla y se texturizaron con un cepillo de dientes.
Finalmente se colocaron las maderas y se repararon los orificios de forma que no quedasen agujeros son cubrir
Y con esto ya teníamos los nuevos almiares listos para pintarlos.
Os dejamos unas imágenes más para que veáis el resultado.
Bueno en general estamos contentos con estos almiares. Aún no estamos muy seguros con respecto al tamaño, y queremos encontrar otra forma de texturizarlos, a ver si encontramos alguna que nos convenza del todo.
¿Creéis que hemos mejorado con respecto a los anteriores? ¿que cambiaríais?